Aprovechar las sobras  y darle un buen uso a la despensa  es el lema de mi cocina diaria, además de conseguir un menú completo  desde el punto de vista nutricional, sabroso  y, por qué no, divertido, distinto. En verano, además, es mejor que sea sencillo y refrescante, porque las temperaturas no le son propicias a las cocciones largas y los platos pesados.

El calor no es impedimento, sin embargo, para comer bien. Si nos cuesta meternos entre fogones cuando el asfalto empieza a derretirse, una buena opción es aprovechar las conservas, las latas, esos magníficos preparados de pescado, verduras y hortalizas que ofrece el mercado español para comer en un plis-plas de forma rápida y suculenta.

Esta receta es una de las mil y una preparaciones que ofrece el arroz estival. En este caso he aprovechado un arroz largo que llegó en nuestra maleta después de unas vacaciones portuguesas. A mí me parece estupendo para estas ensaladas, porque, siendo largo y manteniendo bien la textura, no tengo la impresión de comer esos arroces casi puntiagudos que han perdido sabor y textura de arroz que se comercializan en los supermercados a precios carísimos  y con cocciones ultrarápidas y sospechosas.

Mi único consejo para que esta ensalada sea del agrado de todos es cocer bien el arroz en este utensilio sencillo y escoger bien vuestra conserva. En este caso yo he utilizado los chipirones en su tinta de La Chinata.

 Ingredientes:

200 gr. de arroz largo de buena calidad

Tomates, pimiento rojo y verde, cebolla  fresca y salvia a gusto.

Una lata de chipirones en su tinta La Chinata

Aceite de oliva y sal

Preparación:

Meter el arroz en  la bola  y cocer en agua hirviendo unos 15-18m.

Lavar en agua fría el arroz para que suelte el almidón y quede más suelto. Introducir en la ensaladera.

Picar finamente las hortalizas y las hierbas aromáticas de nuestro gusto.

Aliñar con aceite y sal.

Añadir los chipirones y emplatar.