El bacalao ahumado es un producto  accesible  y versátil que puede dar mucho juego en la cocina. Y, sin embargo, no le prestamos demasiada atención porque queda eclipsado por la omnipresencia del salmón, entre otras razones.

Normalmente pasas delante de él y ni siquiera te fijas,  lo dejas de lado cuando vas ensismismada, pensando en las mil y una cosas que has de hacer ese día.  Tenemos  poco  o nada de tiempo para comprar, y mucho menos, para pensar en recetas distintas con las que salir de la rutina, asi que nuestro repertorio de cenas se convierte en un sota-caballo-rey que nos abruma.

Cocinar cada día es una pesadilla para  mucha gente, incluída yo,  que no estoy exenta del trajín diario.  Los que tenemos que sacar adelante una familia sabemos que  se necesita una dieta variada, unos platos correctos, nutricionalmente hablando, que no sean muy complejos y, sobre todo, rápidos, pero no siempre estamos llenos de magníficas  ideas,  ni vamos por el mundo de los mercados y los súpers repartiendo sonrisas. Todos estamos sometidos al estrés, al voraz paso del tiempo.

Pero, nuestra filosofía no es animarte a que lloremos juntos/as  la rapidez con la que nos hacemos mayores mientras tenemos una implacable lista de la compra en una  mano y en la otra un niño pegandote estirones y pidiéndote cajas de cerales nuevos. No, no era esa nuestra pretensión cuando te empecé a habler del bacalao ahumado, sino descubrirte o enseñarte a mirar los lineales del súper o de tu tienda de barrio de otro modo, como lo harías con un buen fondo de armario armario lleno de posibilidades más fáciles y ricas de lo que pensabas. Sólo hay que pensar que la industria agroalimentaria te ofrece ( aunque decir esto es políticamente incorrecto en estos tiempos) un sinfin de productos que, bien utilizados, pueden ayudarte a comer bien en poco tiempo.

En esos estantes hay algunos productos – legumbres cocidas, maravillosas latas, conservas de pescado, salazones, marinados, escabeches-  que pueden sacarte de un apuro un día en el que quieras preparar una cena digna sin complicarte mucho la vida. Este sencillo  bocata de sardinas en escabeche, por ejemplo,  con unas espinacas salteadas, un  tomate a la plancha y piparras en vinagre  me pierde, es una de mis cenas favoritas. Y lo he preparado en 15 m.

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Fíjate lo que dan de sí unas sardinas marinadas en aceite que compré en el súper el otro día.  Cociendo unas patatas nuevas  y un huevo y añadiendo lo que tengas por la nevera -cherrys, cebolleta, aceitunas, pimiento, alguna hierba aromática- puedes conseguir una ensalada de diez

ensa de patata

El salmón ahumado, desde luego que no falte, pero acompáñalo de aguacate y muchas crudités   junto a una buena salsa de yogurt para que tu bagel sea bueno, sano y perfecto. Lo aprobará hasta  tu dietista:)

Baguel salmon2

Los boquerones en vinagre los suelo hacer yo, pero si tú no tienes tiempo, cómpralos ya hechos y preparate esta monada de tostada  o crostini de berenjena  a la plancha que, además, esta de muerte

bocadillo pincho boquerones - copia

Y hoy le ha tocado el turno, por fin, al bacalao ahumado. Lo he mezclado con unos cuantos ingredientes que tenía a mano ( las habas son de nuestro pequeño huerto, pero también están en la misma estantería:) y le hemos preparado una vinagreta de naranja sanguina y piñones para hacer de esta ensalada esa cena refrescante y ligera que te quieres comer cuando llegas a casa protestando por todo.  Añádele un vinito fresco y….mañana será otro día. Buen provecho!

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