Estimados lectores, cocinillas,  princesitas de Andersen, sibaritas todos, la temporada de guisantes frescos llega a su fin. Ya se sabe, en la naturaleza nada es eterno, solamente cíclico.

Para los que vivimos en la comarca del Maresme el mes de mayo es, apurando al máximo,  el final de la recolección de este caviar vegetal cuyo mejor variedad es el que se conoce como Guisante de Llavaneres.  A partir de ahora, los consumiremos congelados o en conserva y esperaremos que en los inicios de la próxima primavera la climatología- tan imprevisible en los últimos tiempos- nos permita volver a disfrutar de esta delicatessen agrícola.

Nos hubiera gustado hacer muchas más recetas con guisantes, pero el tiempo, los imprevistos, las obligaciones diarias,  siempre se nos echan  encima y nunca podemos cocinar todo aquello que teníamos pensado. Con todo, os hemos preparado una pequeña muestra de los platos que hemos elaborado con guisantes por si queréis aprovechar alguno que aún tengáis por ahí. Algunas de ellas han sido, a pesar de su apariencia sencilla, realmente espectaculares, puesto que hemos podido cosechar por primera vez  nuestros propios guisantes. No os podéis imaginar la diferencia de sabor entre un guisante recogido hace unos días a a aquel que lo coges media hora antes de echarlo en la cazuela, cuando aún conserva intacto el color y el azúcar de esta pequeña y delicada legumbre. Cada flor que despuntaba era un espectáculo que anunciaba una primavera cargada de vida. Por muchos años que viva, nunca dejará de fascinarme la fuerza de la tierra en esta privilegiada comarca barcelonesa.

Hoy, pues, os dejamos algunas ideas que se irán ampliando con el tiempo y, sobre todo, con vuestros comentarios, que son los que, al final, nos interesan, porque nos indican que los lectores le han sacado provecho a nuestro esfuerzo:)  Hemos intentado que haya platos muy simples donde el protagonista es el propio guisante y otros donde es un mero acompañante, pero con una importancia crucial, porque no hay que olvidar que el guisante es, ante todo, una legumbre, y,  por lo tanto,  todo lo que hagamos con él será nutricionalmente mucho más completo. Ya nos contaréis!

Popietas de gallo con crema de guisantes

Imagen de Enrique Marco, para la sección de la revista Cuina realizado en nuestra casa, El Chef a Casa. El chef Pep Nogué nos sugirió que mejoráramos esta receta cambiando el orden de los productos. En lugar de poner el bacon dentro del gallo e introducirlo en una papillote, envolvimos el pescado con el bacon, lo marcamos a la plancha y después se acabó de hacer al horno unos minutos en una simple papillote. El resultado fue espectacular.

Cazuela de cordero con guisantes y nabos a la hierbabuena. 

Estofado de pavo con habas, guisantes y  patatas nuevas. Absolutamente primaveral y mucho menos pesado que si lo hacemos con otras carnes más grasas.

Pollo rustido con parmentier, setas y guisantes

Con huevos? Si, en unos huevos revueltos ( también hubiéramos podido hacer una tortilla campesina, con toda clase de verduritas, pero queríamos aprovechar un poco del platillo de habitas, ajetes y guisantes con una pizca de butifarra que teníamos del mediodía y nos hicimoes este revuelto. Sobre una buena rebanada de pan no hay cena que supere esto:)

Revuelto de guisantes, habas y ajos tiernos. 

Y cómo no! Los guisantes con jamón, los que le gustan a nuestra princesita:)

Bacalao con cebolletas francesas, alcachofas y guisantes: sano y perfecto para los amantes de los sabores limpios, los productos frescos,  y los platos ligeros pero sabrosos.