Pensaba en estos días en la posibilidad de preparar unas recetas que fueran capaces de seducir. San Valentín se acerca y las revistas y los blogs se llenarán de dulces, bombones y otras golosinas que tiene más que ver con la versión mercantilista de la fecha que con el amor. ¿Cómo presentarlas, pues, sin caer en lo cursi, lo empalagoso o en los tópicos de siempre? Me acordé, entonces, de mi propia historia. Yo recuerdo perfectamente la primera vez que cociné para él. No sabía apenas nada, tenía 19 años recién cumplidos, una cocina minúscula en un frío piso de estudiante y mucho miedo de casi todo. Entones, sonó el teléfono y me dijo que llegaría en 30 minutos. ¿ Me invitas a comer,no?  Cómo negarse. Entonces, abrí la nevera e improvisé, preparé un pollo  con los cuatro o cinco ingredientes que tenía a mano a modo de único plato. No era capaz de elaborar nada espectacular, ni clásico, ni moderno, pero tenía que intentar que pareciera vistoso y suculento, tenía que mimar la receta, poner amor en el plato.

Amar no es más que buscar el bien del otro, por eso la cocina es su gran aliado. El único mensaje de mis platos, hoy igual que ayer, es «me hace feliz que estés aquí». Por eso, 30 años después, voy a intentar explicaros algunas recetas que, siendo muy fáciles, resultan de lo más seductoras. Para ello me ayudo de grandes productos que me harán más fácil conseguir un sabor y un aspecto excepcional.  Los detalles son muy importantes en estas ocasiones, pero merece la pena,  de hecho, es lo único que de verdad merece la pena.

Hoy os presentamos la receta del ceviche de corvina que aprendimos a hacer en la master class que ofreció Roberto Sihuay en Palo Alto Market hace un tiempo. Nos encantan sus ceviches, son frugales, delicados, llenos de sabores  contrastados, chisposos, frescos, ideales para una noche como esta. También puedes leerlas en el libro que el restaurante peruano Ceviche 103 publicó en la primavera pasada. Entenderéis mejor la esencia de la cocina peruana, tendréis las recetas más imprescindible y disfrutaréis de sus magníficas imágenes. Puedes leer la reseña que le hicimos entones en este blog.

A este ceviche, para hacerlo nuestro y más especial, si cabe, le hemos añadido perlas de alga wakame, de Naturalviar, y flores de Germinarte, una empresa que comercializa flores comestibles, brotes y  unos microvegetales preciosos con los que vamos a acompañar nuestras próximas recetas. Espero que estas ideas os ayuden a disfrutar de un verdadero san Valentín más allá del 14 de febrero:)