A quién no le gusta el bacalao ajoarriero? Yo creo que es uno de los platos de la cocina vasca, junto con el bacalao al pil pil y la merluza a la donostiarra que más han calado en las casas de otros puntos de la Península.
Para mí, son platos redondos, porque necesitan muy poco más para formar parte de un menú completo. Una merluza a la vasca- y mis hijos pueden dar fe- es una receta suave y, nutritivamente hablando, perfecta, que un niño pequeño puede comer y disfrutar si se les acostumbra desde el principio.
Pero hoy nos decantamos por el bacalao ajoarriero, un plato cuya historia es de las más interesantes de la gastronomía, pues lleva el nombre de ese personaje , el arriero, que recorría las Península de punta a punta, cargando en mulas todo tipo de mercancías e intercambiándolas por otras. Arrieros por caminos polvorientos llevaron a todos los puntos de España el pescado seco ( bacalao, sobre todo), café, pimentón, tabaco, sal, legumbres, pimientos choriceros- base de esta receta-, y otras muchas cosas necesarias para la cocina popular de entonces y la vida diaria. básicas. El ferrocarril y la mejoras en los transportes puso fin a esta vida casi nómada, pero en la cocina vasca está la huella indeleble de esta forma de vida.
Imagen: http://origenlenguaje.blogspot.com.es/2011/10/origen-de-la-expresion-arrieros-somos.html
Pues hoy, tal y como os adelantábamos, vamos a preparar un bacalao ajoarriero, porque “arrieros somos y en el camino nos encontraremos”