Hoy, entre comilona y comilona, tortilla de espinacas, salmón y queso crema. Una solución fácil e idónea para seguir comiendo verduras de temporada y poner un poco de freno al exceso de carne de estos días.
Puedes hacerla con espinacas frescas o congeladas, con salmón fresco o ahumado, con diferentes tipos de quesos frescos o muy tiernos. Dale tu toque personal, pero sobre todo, acuérdate de que los huevos son un comodín perfecto en la cocina. Ya sé que últimamente todos los preferimos a baja temperatura, pochés, “rotos” con foies, jamón ibérico, trufas y demás filigranas gourmets. Pero, en este país, antes de que llegaran los tiempos de las vacas gordas y los “pelotazos” fáciles, los homenajes en restaurantes y la gastrodiversión, las familias consumían a la semana dos o tres tortillas de lo que sea, y esta buena , barata y sana costumbre se está perdiendo. Desde aquí, pues, reivindicamos el recetario de las tortillas ejemplares, aquellas que daban olor y sabor a nuestras noches infantiles y a las que llegaban en seiscientos a todos los campos y playas de la Península. Tempus Fugit!